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La televisión es un medio de comunicación habitualmente denostado y para prueba el apelativo de “caja tonta” con el que suele conocerse. Pero como pasa con todos los medios tecnológicos que han ido incorporándose a nuestra vida cotidiana y que hoy se materializan en forma de nuevas tecnologías y redes sociales, puede hacerse un mal uso de ella o convertirse en un fantástico medio para la divulgación científica y, en nuestro caso, la investigación arqueológica. En esta edición del Festival Internacional de Cine Arqueológico del Bidasoa, que cumple este año su mayoría de edad, hemos recibido distintos capítulos de hasta cuatro series documentales televisivas. Aunque es cierto que la mayoría de las películas que proyectamos año tras año en el festival acaban estrenándose en televisión, la diferencia con estas propuestas es que no son mediometrajes o largometrajes monográficos sino que nacen, ya desde su origen, como una unidad conceptual que va tratando, con el mismo formato y una duración de media hora, distintas temáticas. También comparten una profunda intención didáctica, un lenguaje ameno y un ritmo dinámico que hacen de estas propuestas televisivas una fantástica herramienta de entretenimiento, educación y cultura.
Precisamente esta apuesta por el valor educativo de los documentales seleccionados impulsa la consolidación de la Sección Educativa, que este año, por primera vez y gracias a la contribución de Orona Fundazioa, va a contar con su propio premio. El Festival incluye, por tanto, la Sección Oficial con 22 películas a concurso que optan al Gran Premio del Jurado, y la Sección Educativa, con otras 14 propuestas que optan al Premio Orona. Las 36 películas seleccionadas tendrán igualmente oportunidad de hacerse con el Premio del Público y con el Premio Arkeolan.
No son estas las únicas particularidades del XVIII FICAB. En un año en el que las reivindicaciones feministas han estado a la orden del día, no está de más comprobar la rotunda presencia de mujeres en las películas del festival: desde arqueólogas como Sarah Rudolfs, directora de las excavaciones en la importante cueva paleolítica de Hohle Fels, o Myriam Seco, responsable de la investigación del templo de Tutmosis III en Egipto, hasta directoras de los documentales como Tamara Spitzing o Nagore Rementeria, pasando por historiadoras, egiptólogas, epigrafistas, genetistas, conservadoras, restauradoras y un largo etcétera. Porque como en otros campos, en Arqueología también tenemos mucho que decir.FICAB XVIII
Año: 2018
Fecha:: 19-24 noviembre
Juncal Eizaguirre. Delegada de Cultura del Ayuntamiento de Irun.
Josean Ruiz de Azúa. Director
del área de Cultura y Deportes del Ayuntamiento de Irun.
Cristina Aguirre. Gerente del Museo Romano Oiasso
Elena Torregarai. Responsable científica del Museo Romano Oiasso
Itsaso Bikuña. Idoia Castro. Departamento de Educación y Acción Cultural del Museo
Romano Oiasso
Mònica Borrell. Directora del Museo Nacional Arqueológico de Tarragona.
Vocales:
Peter Eeckhout. Arqueólogo y profesor de la Universidad Libre de Bruselas (Bélgica).
El Campus de Arqueología y Paleontología de la Universidad Autónoma de Barcelona es una red de yacimientos arqueológicos, museos y parques arqueológicos donde la universidad desarrolla su investigación y su docencia. El campus tiene diferentes sedes repartidas por el territorio que responden a variadas cronologías y ofrece a los estudiantes la oportunidad de formarse en el trabajo de campo. Este cortometraje presenta el yacimiento Torre Llauder, una villa romana situada en el territorio de la ciudad de Iluro, la actual Mataró.